Aestatis in urbe
Calor Buenos
Aires Calentísimo
Calor de
cemento Calor de mostaza
Arde el
mediodía
Hormigas de
dos patas
pulen veredas
lustran baldosas
sortean las grietas
Zumbidos des
alados sobrevuelan
agujeros que
son casi fosas
Tropiezan con
o sin disculpas
Golpean sus
cargas Deliran palabras
dirigidas a
nadie o a todos o a todo
Caballos de
fuerza rezongan al sol
Se detienen
furiosos ante el guiño rojo
Todos con
apuro bufan su bronca
tronando motores a todo vapor.
Calor Buenos
Aires Calentísimo
Calor de
cemento Calor de mostaza
Siesta
urbana
de verdes
ausentes
atizando los
cuerpos
alterando
las mentes
agotados
ambos
de tanto
apuro de tanto stress.
Calor Buenos
Aires Calentísimo
Calor de
cemento Calor de mostaza
Atardecer
dorado que no deja ver
Baja un
cambio el caótico ritmo
una chela fría un fernet con cola
y a la
caravana yendo pa las casas
por una
autopista a punto de quebrar.
Calor Buenos
Aires Calentísimo
Calor de
cemento Calor de mostaza
Cuando el
sol recueste su último rayo
quedará solo el rumor tenue del pulso
de la ciudad
dormida
suspendida en la noche.
Liliana
Bianco
No hay comentarios:
Publicar un comentario