martes, 12 de noviembre de 2013

1ª ENCUENTRO INTERNACIONAL DE ESCRITORES BRANDSEN - LA PLATA 2013

TRABAJO CON LAS ESCUELAS

Los alumnos de cuarto grado A y B, de la Escuela Nº 8 de Brandsen, a cargo de la Señorita Nelly Trabajaron con mi cuento, me contaron su experiencia, lo ilustraron e hicieron un montón de preguntas. ¡UN LUJO!

Se me hizo un nudo en el pecho

Zapatos color gris. Vestido gris. Cabello gris. Sombrero rojo.
Pálida. Apenas un toque de carmín. Su cara refleja la paz inexistente en esta vida. Ni una sola contracción en sus patas de gallo profundas de sabiduría; ningún rictus en la delicadeza de las líneas marcadas en su rostro. Su belleza -porque es bella- no es de este mundo.
Todo en ella parece normal. Sus ojos, que soportan pacientemente mi escrutinio; sus manos, sus dedos finos y sus uñas cortas bien cuidadas; su pulso inexistente que acelera el mío. Ninguna contusión. Ningún indicio de este parir la muerte, de invertir la vida. La imagino joven y me deslumbro. Un ángel caído. Me digo. Otro más.
Contengo las ganas de llorar. Dicen que los hombres no lloran pero si eso solo hace la diferencia de género les aseguro que debería renunciar al mío.
En esta profesión es difícil no llorar. Cuando estudiante me dijeron que uno se acostumbra, que uno aprende a colocarse la armadura y ya; si no, no podes hacer tu trabajo. Esta asignatura la tengo pendiente a pesar de mi amplio y largo desempeño, pero como es opcional puedo ejercer sin que sea un problema.
Le quito con cuidado el sombrero que quedó imperturbable a la caída y al traslado. Indiana Jones se me cruza fugazmente y no puedo más que sonreír. Su cabello parece iluminado por un rayo de luna. No puedo resistir la tentación de acomodarlo, y una corriente me recorre el cuerpo entero ante el contacto.
Es un ángel, insisto. No todos los ángeles tienen alas.
El llamado del altavoz me sustrae de la situación. Mi pecho parece no latir, como el corazón de ella. Me alejo respondiendo al llamado. Ya no hay nada que hacer,... Camino sobre nubes, me siento ligero,  leve, como si no pesara nada. El cansancio desapareció. No me molestan las rodillas aburridas de andar estos pasillos. Me siento joven y lleno de energía.

Se corrió de mi vista pero no de mí. Ella me tiene hechizado. No puedo entender lo que me pasa. Es casi mediodía y ya me voy. Pero antes voy a pasar por la guardia. Quiero verla una vez más.

No está. Consulto el libro: nada. Sobre la camilla el rojo de su sombrero me llama. Sin pensarlo dos veces lo tomo como un chico que roba una golosina y lo meto en mi bolso.
La perdíDefinitivamente.
Me invade el desosiego del abandono. Esa infinita tristeza que ni siquiera conmueve. Que te aleja de tus iguales.

Ya en casa tomo el sombrero. Recorro con mis dedos el paño extrañamente suave. Cierro mis ojos y su rostro llega a mí.
Siquiera sé tu nombre, le digo.
Instintivamente miro el interior del sombrero y una etiqueta se dibuja ante mis ojos: Angelita Luz.
Mi corazón se aprieta. Se contrae con fuerza. Queda inmóvil atrapado en un nudo que ya no podrá desatarse. Mi cuerpo se estremece por última vez. Puedo verlo despatarrado en el sillón totalmente relajado. Así estará un rato. No más. Hasta que la rigidez se apodere de él.

Decido partir. Aquí tampoco hay más que hacer. Tal vez me esté esperando.
Zapatos color gris. Vestido gris. Cabello gris… Angelita, Luz de luna.
Te llevo tu sombrero.


Liliana Bianco














LOS ARTISTAS:

4ª A:
        IARA; DELFINA; NICOLAS; AGUSTIN; JUAN; CESAR; AGUSTINA y FRANCO

4º B:
        FERNANDO; MAURO; ANTONELA; VANINA e ISABELA

Y el aporte inapreciable de la SEÑO: NELLY

A todo ellos ellos ¡GRACIAS, MUCHAS GRACIAS! FUE UNA EXPERIENCIA MARAVILLOSA!


Corolario: Nunca, pero NUNCA, subestimemos al lector

1 comentario:

  1. Una felicitación para todos, así de esta manera el Encuentro cumplió con su objetivo esencial.
    Luis Holgado.

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